¿La tecnología alivia o agota a los maestros?
El sábado pasado, me metí de lleno en una capacitación de Blackboard para maestros.
“Esto está increíble”, pensé.
Actividades, evaluaciones, foros de debate.
Todo en un solo lugar.
Suena como el sueño de cualquier maestro, ¿no?
Pero mientras exploraba la plataforma, no podía dejar de pensar en mis colegas.
Esos y esas que no son tan clavados con la tecnología como yo.
¿Para ellos esto será tan útil como parece?
El lado oscuro de la tecnología para maestros
En un artículo de Gizmodo titulado “La tecnología debería aliviar el agotamiento del maestro, pero a veces lo empeora”, se cuenta una historia distinta.
Hablaron con casi 800 maestros en Estados Unidos.
¿El resultado?
Muchos dijeron que los sistemas de gestión del aprendizaje, como Canvas o Blackboard, no simplificaron nada. Todo lo contrario.
Un ejemplo: antes de la pandemia, los maestros entregaban sus planeaciones en papel.
Fácil.
Ahora, además del papel, tienen que subirlas al sistema… ¡en otro formato!
Un paso extra que no estaba antes.
¿Y qué pasó?
Exacto. Más trabajo, más frustración.
En la misma investigación, una maestra de Las Vegas dijo algo que te deja helado:
“Mis niños no saben contar hasta diez, pero tienen que aprender un número de seis dígitos para acceder a Canvas.”
Ahí está la realidad.
¿Dónde está el problema para los maestros?
El problema no es Blackboard, Canvas o la tecnología en general.
Es cómo se implementa.
En lugar de simplificar, se añaden pasos.
En lugar de eliminar trabajo, se multiplica.
Y no lo digo yo. En el estudio Understanding Teacher Burnout Following COVID-19, concluyen que la falta de apoyo administrativo y la carga extra de las herramientas digitales contribuyen directamente al burnout docente.
¿Cómo lo arreglamos?
Hay tres claves:
- Elimina lo viejo si introduces algo nuevo. Si ya usamos Blackboard, olvidemos los formatos en papel.
- Capacita de verdad. Que usar estas herramientas sea fácil, no un curso intensivo de frustración.
- Apoya a las personas. Más autonomía, menos burocracia.
Porque, como dicen Marshall y Pressley en otro estudio publicado por SAGE, los maestros quemados no solo afectan sus propias vidas. También afecta a sus estudiantes, a las escuelas y al futuro de la educación.
Ahora dime tú
¿Sientes que estas herramientas te facilitan la vida o te la complican?
Cuéntamelo aquí.
Mientras tanto, puedes leer más sobre esto en luisgyg.com/mail.
Porque al final, la tecnología debe ser una aliada.
No una piedra más en la mochila. 💻
