Muchos mexicanos han sido víctimas de ofertas engañosas que prometen servicios gratuitos. La promesa de obtener algo sin costo alguno suena tentadora, pero en realidad, esconde tácticas que pueden perjudicar a los usuarios. Estos servicios gratuitos suelen aprovecharse de la falta de conocimiento sobre cómo funcionan, y terminan cobrando en formas inesperadas, como la venta de datos personales o la inserción de publicidad invasiva.
La famosa frase “cuando las cosas son gratis, el producto eres tú” refleja esta realidad. Los servicios gratuitos en internet, como redes sociales o aplicaciones, monetizan a sus usuarios a través de la recopilación y venta de sus datos personales. Por ejemplo, aplicaciones populares recopilan información sobre tus hábitos de uso, ubicaciones y preferencias para crear perfiles detallados que luego venden a anunciantes.
Un claro ejemplo de este tipo de engaños es el plan básico con publicidad de Netflix. Aunque parece una oferta atractiva por ser más económica, obliga a los usuarios a ver anuncios y, además, recopila sus datos de visualización para publicidad dirigida. En esencia, los usuarios están pagando de una manera diferente, con su atención y privacidad, lo que demuestra que los servicios gratuitos no son tan gratuitos como parecen.
Ejemplos de Servicios Gratuitos Engañosos
Las suscripciones de pago como Twitter Blue y Meta Verified también ilustran cómo las empresas diversifican sus ingresos. Estos servicios no solo ganan dinero con la publicidad, sino que también cobran directamente a los usuarios por características adicionales. Sin embargo, esto no siempre garantiza una mejor privacidad o experiencia. Los usuarios que pagan esperan menos anuncios y más seguridad, pero a menudo siguen siendo objetivos de la publicidad y sus datos personales no están completamente protegidos.
Esta situación se agrava con los crecientes problemas de ciberseguridad. Según un informe de Fortinet, México recibió 94,000 millones de intentos de ciberataques en 2023, casi la mitad de los registrados en toda América Latina. A pesar de pagar por ciertos servicios gratuitos, los usuarios continúan siendo vulnerables a violaciones de datos y otras amenazas cibernéticas. Las empresas prometen protección, pero los datos siguen siendo explotados con fines comerciales.
Un caso notable es el reciente hackeo a la DGT en España, donde datos personales de más de 34 millones de conductores fueron puestos a la venta. A pesar de las promesas de privacidad, las empresas a menudo no pueden garantizar la seguridad total de los datos. Los usuarios, incluso cuando pagan por servicios premium, deben estar conscientes de que sus datos pueden estar en riesgo y ser utilizados de maneras no deseadas.
Los servicios gratuitos a menudo ocultan costos adicionales. Al usar plataformas como Facebook y Google, las personas entregan sus datos personales a cambio de acceder a estas redes. Estos datos son valiosos y se venden a terceros para publicidad dirigida, generando enormes ingresos para las plataformas. Así, aunque los servicios parezcan gratuitos, los usuarios pagan con su privacidad y datos personales.
Para protegerse, es crucial estar informado y ser cauteloso con los servicios gratuitos. Evaluar las políticas de privacidad, utilizar herramientas de protección de datos y ser consciente de los permisos que se otorgan son pasos esenciales. Si quieres conocer los últimos gadgets que estoy probando, visita instagram.com/LuisGyG o facebook.com/LuisGyG. Para apoyar este espacio, puedes aprovechar las mejores ofertas de gadgets en Amazon en este link. Y si estás buscando un conferencista en tecnología e inteligencia artificial, puedes contratar mis servicios aquí.