Cuando hice el review de las Ray-Ban Meta, jamás pensé en las escuelas.
Hablamos de conciertos.
De eventos donde te miran raro si ven que puedes grabar con solo mover los ojos. O pedirle algo a la IA sin sacar el teléfono.
Pero jamás se me cruzó por la cabeza que eso pudiera ser un problema en un examen de admisión.
Hasta que pasó.
Y no fue menor: una universidad pública en México ya tuvo su primer caso de fraude en examen de admisión con lentes inteligentes.
¿Cómo fue este fraude en examen de admisión?
El 23 de junio de 2025, durante el primer día de exámenes para ingresar a las carreras del área de la Salud en la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), un aspirante fue sorprendido intentando grabar el examen con unas gafas inteligentes.
Lo reportaron medios como TV Azteca, Xataka México y Record.
No estamos hablando de un alumno copiando con papelitos.
Era un dispositivo con capacidad de grabar video, activado durante la prueba.
La intención, según explicó el secretario general Javier Cervantes Rodríguez, era capturar el contenido del examen EXANI-II del CENEVAL. Un intento claro de fraude en examen de admisión.
Y no lo van a dejar pasar.
La UMSNH anunció que procederá legalmente contra el aspirante. No solo lo sacaron del examen. Van con todo.

¿Qué tanto se vigila un examen así?
Más de lo que parece.
Ese día había más de 5,000 personas presentando examen para carreras como Medicina, Nutrición, Fisioterapia y Rehabilitación.
Pero también había:
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Vigilancia universitaria especializada
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Supervisores del CENEVAL
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Una notaria pública certificando todo
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Y personal capacitado para observar comportamientos raros
Lo confirmó el secretario académico Antonio Ramos Paz, según MiMorelia. Dijo que el personal está entrenado para identificar trampas, revisar procesos y aplicar protocolos de seguridad.
Y eso fue clave.
Detectaron las gafas, lo confrontaron y lo sacaron.
¿La universidad qué dijo?
Fue directa.
La rectora Yarabí Ávila González declaró que en la UMSNH “no hay recomendados, no hay consentidos”. Que solo entra quien se preparó y tiene vocación.
También lo dijo en entrevista para Sipse: “los exámenes están completamente blindados”. No hay acceso externo. No hay corrupción.
Y por si alguien tiene dudas, la convocatoria oficial lo deja claro: está prohibido ingresar con celulares, laptops, audífonos, relojes inteligentes o cualquier dispositivo electrónico. Puedes leerlo tú mismo en el documento disponible en Unitips.
Cuando alguien falta a la honestidad, “se invalidan todos los actos derivados de la convocatoria”.
Así, con esas palabras.
¿Es un caso aislado?
Por ahora sí, en esta universidad.
Pero no es el único en México.
En el examen ECOEMS que aplicaron de forma conjunta la UNAM y el IPN, se utilizaron sistemas de inteligencia artificial para detectar trampas. De acuerdo con Xataka México, lograron identificar y bloquear a 47 aspirantes que intentaron hacer trampa con tecnología.
Ya no se trata de quién copia, sino de quién tiene el gadget más discreto.
Y aún así, los cachan.
Porque ahora las universidades también usan tecnología para cuidar sus procesos.
Y porque la presión por entrar a una carrera de alta demanda no justifica romper las reglas.
¿Por qué esto es importante?
Porque las herramientas no son el problema.
Lo peligroso es el uso que se les da.
Las Ray-Ban Meta que yo uso me permiten grabar y transcribir lo que veo. Me ayudan en reuniones, eventos, hasta para tomar notas de ideas al vuelo.
Pero nunca las he usado para violar reglas o intentar engañar a alguien.
El aspirante de la UMSNH quiso usarlas para lo contrario: obtener ventaja sobre miles de personas que sí se prepararon, que sí respetaron el proceso.
Y eso se castiga.
Porque no puedes competir limpio con trampas.
Porque hacer fraude en examen de admisión no es un acto aislado: es una falta grave a toda la comunidad académica.
Y porque si no se detiene desde ahora, se convierte en costumbre.
Mando un mail diario a las 3:30 PM. Se lee en dos minutos.
Ahí te cuento cómo uso la inteligencia artificial en mi día a día, cómo mejorar tu productividad sin volverte robot, y también cosas como esta: cómo evitar errores que parecen pequeños, pero te pueden costar todo.


