Durante el evento “Impact Roadshow Monterrey de Schneider Electric,” se destacó un tema crucial: los riesgos de ciberseguridad en las operaciones. En la conferencia titulada “Ciberseguridad: Riesgo en las Operaciones,” impartida por Antonio Ramírez de TXOne y Samuel Aceves de Schneider Electric, se abordaron los desafíos y soluciones en la intersección entre ciberseguridad y operaciones industriales.
La transformación digital y los riesgos de ciberseguridad
La transformación digital ha impulsado a muchas industrias a adoptar tecnologías conectadas que, aunque mejoran la eficiencia, también aumentan los riesgos de ciberseguridad. Ramírez y Aceves destacaron que muchos sistemas operativos en plantas industriales son obsoletos y no cuentan con las actualizaciones necesarias, lo que los hace vulnerables a ciberataques. Estos riesgos de ciberseguridad son una amenaza latente que puede afectar gravemente la continuidad de las operaciones.
Un ejemplo dado en la conferencia ilustra cómo una planta industrial podría verse comprometida por un simple dispositivo USB infectado. Este tipo de situaciones, aunque parecen inofensivas, representan riesgos de ciberseguridad que pueden tener consecuencias catastróficas si no se abordan adecuadamente. La seguridad en las operaciones no se trata solo de proteger datos, sino de mantener la integridad de los procesos productivos.
La interconectividad que viene con la Industria 4.0 ha abierto nuevas puertas para los ciberataques. La falta de medidas adecuadas para mitigar los riesgos de ciberseguridad puede llevar a que una planta industrial vea comprometida su producción por ataques de ransomware, como señaló Aceves en su intervención. Este tipo de ciberataques, que no solo secuestran datos sino que detienen operaciones, son cada vez más comunes en sectores como el manufacturero.
Estrategias para mitigar los riesgos de ciberseguridad
Antonio Ramírez explicó que la clave para mitigar los riesgos de ciberseguridad es reducir la superficie de ataque. Esto significa identificar y proteger los puntos vulnerables en la red operativa de una planta. Ramírez enfatizó la importancia de un enfoque proactivo, donde la gestión de riesgos se convierte en una prioridad para evitar que cualquier vulnerabilidad sea explotada.
Una de las recomendaciones más destacadas fue la de crear capas de protección adicionales para los sistemas obsoletos que no pueden ser reemplazados de inmediato. Este enfoque permite mantener la continuidad de las operaciones mientras se desarrollan planes a largo plazo para la actualización de los sistemas, reduciendo así los riesgos de ciberseguridad.
Samuel Aceves complementó esta visión al señalar que los riesgos de ciberseguridad deben gestionarse desde un enfoque integral, donde la ciberseguridad no sea vista como una responsabilidad exclusiva del departamento de TI, sino como un compromiso de toda la organización. Esto incluye la formación de los empleados en prácticas seguras y la implementación de políticas que refuercen la cultura de seguridad.
Los expertos también abordaron la necesidad de una segmentación segura de la red. Al dividir la red en segmentos más pequeños, es posible contener un ciberataque en caso de que ocurra, minimizando el impacto en las operaciones generales. Este tipo de estrategia es vital para reducir los riesgos de ciberseguridad en infraestructuras críticas. Además, se destacó la importancia de la detección temprana de anomalías en la red. Contar con sistemas que monitoricen constantemente el entorno OT (tecnologías operativas) y alerten sobre cualquier actividad inusual puede ser la diferencia entre detener un ataque a tiempo y sufrir consecuencias graves.
¿Es posible una protección total?
Aceves subrayó que, en ciberseguridad, no se puede aspirar a una protección total. Sin embargo, es posible gestionar los riesgos de ciberseguridad de manera que el impacto de un ataque sea mínimo. La clave está en conocer el entorno, identificar las vulnerabilidades y establecer controles adecuados para reducir el riesgo.
Un aspecto crucial para mitigar los riesgos de ciberseguridad es la colaboración entre las diferentes áreas de la organización. Ramírez y Aceves enfatizaron que la ciberseguridad debe ser una responsabilidad compartida, donde todos los departamentos trabajen juntos para identificar y mitigar los riesgos.
Otro punto importante fue la gestión de los dispositivos conectados. En la conferencia se mencionó que, con la proliferación de dispositivos IoT (Internet de las Cosas) en el entorno industrial, se hace aún más necesario establecer controles estrictos para garantizar que estos dispositivos no se conviertan en puertas de entrada para ciberataques.
Los ponentes también hicieron hincapié en la importancia de una respuesta rápida ante incidentes de ciberseguridad. La capacidad de una organización para reaccionar de manera ágil y efectiva puede determinar la magnitud del impacto de un ciberataque. Estar preparado con un plan de respuesta es esencial para minimizar los daños.
Finalmente, se discutió el valor de realizar simulaciones de ciberataques para evaluar la preparación de la organización. Estas simulaciones permiten identificar debilidades en la estrategia de ciberseguridad y mejorar los protocolos de respuesta, reduciendo así los riesgos de ciberseguridad en las operaciones diarias.
En conclusión, la conferencia subrayó que los riesgos de ciberseguridad son una realidad ineludible en las operaciones industriales modernas. Y si estás buscando un conferencista en tecnología e inteligencia artificial, puedes ver los temas que manejo en este link.