Cuando buscas un producto… quieres el producto; ¿o no? Quieres una botella de agua, no la representación de esa botella de agua. Quieres una habitación de hotel, no la representación de una habitación de hotel.
Obvio, si estás en un ambiente virtual, y compras algo para ese mundo, no compras un producto, compras la representación de ese producto para tu mundo virtual. En ese sentido: esa representación (ese cuarto de hotel, esa botella de agua) se convierte en un nuevo producto.
Es así, que durante mi estancia en el Mastercard Innovation Forum me voló la cabeza porque me hizo entender qué posibilidades tenemos para poder monetizar realmente. Pero vamos por partes.
Cómo serán los negocios en el Metaverso.
Quizá me equivoque pero, para mí, el metaverso planteado como Roblox o Fortnite, es más similar a un sistema de gamification. Es decir, está genial hacer conciertos en línea, pero lo que la Generación Z y el resto queremos es ir al concierto y vivir la experiencia real, y más después de haber vivido un confinamiento.
Y el concierto virtual no está mal, sin embargo, aleja a los sectores más longevos de la población. Para los más jóvenes es un juego, pero no es la experiencia. Si a mi hijo le digo qué prefieres, ir a jugar futbol con tus amigos o jugar futbol en Roblox: la respuesta es ir al campo y patear un balón.
Pero no voy a generalizar, vamos a ver qué dicen los expertos. En el Mastercard Innovation Forum, acá en Miami Florida, gente como Cathy Hackl (la madrina del metaverso) opinan que el metaverso no será Ready Player One, la película/novela escrita por Ernest Cline, donde la gente vive en mundos virtuales y de esa forma estudia, trabaja y se divierte en una economía virtual.
Si este no es el camino, ¿cuál será el futuro para que esta tecnología aterrice y genere en esquema económico?
Aquí está el futuro del Metaverso. Y para responder esta pregunta quiero que veas este video:
Se trata de un concepto realizado por Adobe, del recorrido que hace una persona en su vida diaria. Se coloca una lentes y comienza a hacer su vida. ¿Qué es diferente de nuestra vida actual?
Que conforme va haciendo recorridos, va obteniendo información a cada paso: el clima, notificaciones de sus plataformas, llamadas de acción de productos y servicios, precios, instrucciones para consumir medicamentos, rutas o direcciones en tiempo real, arte digital en muros, activaciones publicitarias, perfiles de tus compañeros de trabajo, información de gobiernos locales, etc. Datos que son virtuales, y que están sobrepuestos en espacios REALES.
Donde yo veo algo mucho más cercano -y factible para el mundo de los negocios-, es en la realidad mixta, donde el uso de gafas y visores es preponderante: la idea es poner elementos virtuales o gemelos digitales para ver cómo lucirían en la vida real.
Siendo así, tú podrías ver cómo se te queda un pantalón de Zara, sin tener que ir a la tienda. O checar cómo se vería un sofá de IKEA en tu sala y así determinar si realmente cabría.
Gente como Siemens ya están utilizando los gemelos digitales para optimizar los recursos energéticos en edificios, e incluso en prototipos de autos de carreras, lo que genera enormes ahorros y reduce errores de producción y ejecución. Todo esto, en conjunto, me hace ver la factibilidad de los gemelos digitales a nivel marketing y productos.
El Reto Tecnológico.
Sin embargo, el reto está en la tecnología. Y es que el uso de gafas/visores de realidad mixta siguen teniendo un factor de forma que no es portátil ni práctico para el usuario. Al tiempo que es necesario que estos visores no te aislen, sin que sirvan para ver tanto entornos reales, como virtuales.
Firmas como Qualcomm y sus socios de negocio, ya está trabajando en esto, y preocupados por solventar tres retos principales: baterías, procesadores y cámaras. La idea es que estos tres elementos quepan en armazones oftalmicos que usamos hoy en día. De igual forma, los procesadores deben tener una latencia mínima o inexistente, ya que cualquier retraso de lo que veas en pantalla con respecto a la vida real, podría ser incluso peligroso y restarle a la experiencia del usuario. No obstante, esto no está lejos.
Cómo monetizar.
Es así, que la misma Cathi Hackl menciona nuevos conceptos de monetización:
- Físico a Físico: Compras con en una tienda un producto real.
- Ecommerce: Compras en la web un producto convencional.
- Virtual a Virtual: Adquieres en plataformas digitales un producto virtual, un videojuego.
- Físico a virtual: Compras en un espacio convencional o real, un producto virtual.
- Virtual a físico: Compras en un espacio virtual un producto real.
Todo esto puede ser el punto de partida para crear nuevos productos, espacios publicitarios y colocar productos (actuales y nuevos). Lo que es un hecho es que el cómo apenas los estamos construyendo.
